Atrapado en el tiempo: ¿ Y si no hubiera un mañana?

     ¿Y si no hubiera un mañana? ¡ Hoy no lo ha habido!

     Phil Connors, el hombre del tiempo de una cadena de televisión,  es un tipo frío y cínico, y todo ello más su carácter agrio no le convierten precisamente en alguien muy simpático frente a las personas que se encuentra en su día a dia.
     Un suceso extraordinario cambiará su vida por completo, haciéndole pasar por los innumerables matices de la condicion humana, encontrándose a sí mismo y volviéndole finalmente más cercano y empático ante los seres humanos.

        Este podría ser el más sencillo resumen de "Atrapado en el tiempo" , este film impar, que , en la ceremonia de los oscars de 1994 , y si hubiese justicia en el mundo humano, (con permiso de la prodigiosa "Lo que queda del día") debería haber alcanzado una amplia cosecha de premios en las categorías mas importantes. Lástima que ése  fuera el año de Spielberg y su trágica epopeya judía, " La lista de Schindler", estimable película, pero también tremendamente previsible, y que carece del ingenio y la profundidad de esta obra maestra de Harold Ramis. Se han hecho y se podrán hacer más películas sobre campos de concentración y sobre los nazis, pero raramente habrá otra película como Atrapado en el tiempo. Acaso nunca.

      Partiendo de un guión que desborda ingenio y originalidad, Ramis construye una parábola acerca de nosotros mismos, de nuestras mezquindades, carencias , egoísmos, ilusiones y pequeñas heroicidades. La diversidad inacabable de matices y estados anímicos por los que transita el protagonista son los mismos que los nuestros, y eso es lo que hace este film tan especial y raro. Nos lo da todo, de manera modesta, sencilla, sin estridencias, sin pretensiones vanas ni pomposas. Es la puesta en escena de esa búsqueda de la felicidad tras la que todos andamos y que pocos parecen conseguir. Bill Murray lo logra a través de un duro camino . El de años de permanencia en un pequeño pueblo del que estaba deseando salir pero en el que finalmente parece encontrar todo aquello de lo que carecía su vida.

      Los diálogos de este film, sus escenas, son tan brillantes como los de Casablanca. Plagados de sutileza, de humor, ingeniosos y lúcidos, conforman un catalogo memorable. Bill Murray parece nacido para interpretar este papel, y Andie Macdowell esta encantadora y dulce.
      Se puede ver Atrapado en el tiempo muchas, muchas veces. Su riqueza argumental, la agilidad, la engañosa sencillez de su montaje,  sus aspectos filosóficos acerca de la existencia humana, su capacidad de espejo que nos devuelve nuestras debilidades y esperanzas a través del tamiz de la comedia, hacen de su visión una delicia, y , siempre, una experiencia reflexiva y honda.

       Los académicos de Hollywood no suelen otorgar, en sus premios, importancia a la comedia, que en escasas ocasiones ha ganado premios mayores.  Prefieren lo dramático. Asi, la pretenciosa El curioso caso de Benjamin Button, que también pretendía disertar sobre la condición humana, concitaba numerosas nominaciones y prestigio en 2008, pese a lo plúmbeo de su desarrollo y sin que consiguiera desentrañar cabalmente ningún aspecto esencial de la existencia. Atrapado en el tiempo, un film sencillo , divertido y profundo a la vez,  queda como el claro ejemplo del error de criterio que  supone mostrar indiferencia hacia el genero de la comedia, cuando es a través del humor que podemos vernos a nosotros mismos de la manera mas honda y reflexiva.

       Gracias a Harold Ramis, y a Danny Rubin, co-autor del guión, tenemos ocasión de ser mejores y más conscientes cada vez que nos acerquemos a esa pequeña localidad nevada donde la marmota muestra su hocico y predice graciosamente el tiempo.
   
     El tiempo o, quién sabe,  nuestro futuro.